Se trata de un colorido rompecabezas en el que vas a tener que deslizar una bola por un laberinto para pintarlo por completo y poder pasar al siguiente.
Cómo se juega:
Hay que desplazar la bola en línea recta por sus complejos niveles para no dejar ninguna parte sin colorear, aunque tienes la suerte de que no hay límite de tiempo ni movimientos.
Jugabilidad:
Cuenta con cientos de niveles en los que verás como la dificultad crece paulatinamente, pudiendo además desbloquear otras bolas con diferentes colores.
Es en realidad tan sencillo que carece de tutorial, basta con deslizar el dedo para mover la bola, pudiendo ver este vídeo con una gameplay para saber cómo funciona.